Buenas tardes mi nombre es Agustín , es la primera vez que escribo en un blog y la verdad es que voy a empezar por presentarme, quiero que sepáis quien soy antes de pasar a detalles mayores. 
Tengo 80 años, y vivo en una vieja casa en el mítico barrio de la latina, en la cava alta. Tuve una gran infancia, mis padres me cuidaban mucho y siempre me dieron todo lo que pedí, estudie en las mas grandes escuelas y tuve los mejores profesores particulares, mis padres me obligaban a tocar el piano y la pianola, no tenia tiempo para nada, ni si quiera para estar con mis amigos. Cuando conseguía escaparme un poco solo me quedaba jugar con mi pelota, me tiraba horas dándole patadas y patadas. Mi padre era general en las tropas de Franco, ganaba mucho dinero y la gente le valoraba, aunque muchos republicanos lo tenían en el punto de mira, mi madre era enfermera, la mejor que jamas hubo en la Tierra. Casi nunca estaban en casa asique la mayor parte del tiempo me lo pasaba con mi cuidadora Isabela 
                               
Recuerdo que un día soleado de abril mientras me entretenía con un nuevo juguete que mi madre me había comprado, una chica lo bastante apuesta como para enamorar se me acercó.
-Hola 
* Hola -conteste tímidamente y con un fino hilo de voz
-¿Como te llamas? -hablaba fluidamente y con una gran sonrisa todo el rato-
*Agus ¿y tu?
-Lara -Sonrio y se fue-


No la volví a ver hasta pasados bastantes días, recuerdo que era muy amable y simpática, empezamos a vernos casi todos los días, incluso me saltaba clases de pianola para poder estar con ella, cosa que mis padres nunca aprobaron, ella era de una familia a los que mis padres llamaban 'Rojos de mierda' nunca entendí que tenían en su contra. Y así crecí entre bombardeos y tiempos de calma, con Lara siempre cogiendo mi mano, hasta que un dia mientras paseaba por la calle unos fachas la pegaron un tiro y todo por no tener sus mismo ideales, guarde todos sus viejos regalos y todo aquello que un dia me dio, la conseguí olvidar, me licencie y me hice profesor de niños pequeños, siempre me recordaban a aquellos años cuando yo jugaba con la pelota y ella aun estaba. Cuando tenia 28 años mis padres murieron asesinados y me quede solo, tuve que buscarme las habichuelas por todos los lados, me casé, tuve hijos, viví un tiempo en Nueva York y la vida al final me trajo hasta mi actual barrio, ahora estoy solo, el alcohol me perdió a mi y me hizo perder a toda mi familia ahora estoy aquí sentado en mi viejo sillón con un viejo perro de peluche con una chapita colgada al cuello, no recuerdo quien me lo regalo pero seguro que fueron tiempos para no olvidar.