sábado, 24 de septiembre de 2011

The smile on your face lets me know that you need me,There's a truth in your eyes saying you'll never leave me, The touch of your hand says you'll catch me when ever I fall ,You say it best, when you say nothing at all..



Paro, respiro hondo y miro atrás, intento buscar un buen recuerdo por el que empezar a escribir esto, pero por mas que lo busco no lo encuentro, no porque no exista, sino porque hay millones. Quiero empezar por el principio, retroceder hasta 2005 el año en que te conocí, el año en el cual por fin supe lo que era tener una amiga de verdad. Es cierto que solo teníamos 11 años o 12 recién cumplidos, que obviamente ninguno de los dos sabíamos que esto iba a llegar a ser tan sumamente gigante, pero creo que puedo recordar con total claridad nuestras primeras charlas, recuerdo la primera vez que te llame al teléfono de casa, puede que tu lo hayas olvidado pero yo no pues me confundí de teléfono y me salia una voz muy rara que me acojono bastante, estuve como media hora escuchando esa puta voz una y otra vez hasta que por fin escuche la tuya y pude saber a que hora habíamos quedado para ir al cine de príncipe pio, recuerdo nuestros primeros abrazos entre clase y clase, nuestras primeras tardes juntos y las fotos en el banco de tu casa en aquel cálido verano. Veo como poco a poco hemos ido creciendo juntos, casi cogidos de la mano y la verdad es que no puedo evitar emocionarme al recordar las tardes de cine o de tortitas o de cumpleaños en los que acabamos comiéndonos una tarta con los dedos en un portal, porque aunque se que puedo sonar repetitivo lo que hemos vivido tu y yo, eso no se lo imagina nadie y sobre todo estoy seguro que nadie en todo el universo tiene nada tan valioso como nuestros recuerdos.


Porque claro quien va a imaginar que con nuestra edad nos peleemos en un césped con armas imaginarias y barrancos que caen directamente al mar, que nos hagamos fotos agarrados a un árbol o que siempre vayamos haciendo el tonto por la calle sin preocuparnos si quiera que nos mire mal la gente y es que en todos estos años  hemos compartido millones de secretos, lagrimas, miles de sonrisas cada vez que nos miramos y bastantes carcajadas, porque solo contigo puedo tirarme horas y horas hablando por teléfono sin aburrirme, porque nadie mas me ha dejado sordo por ver una araña, ni conozco a nadie que le haya explotado un plato en la mano, porque nunca pensé que llegase a conseguir el titulo de maruja oficial y sobre todo de divino. Podéis preguntaros porque escribo todo esto, el porque de todos estos recuerdos, pues por una simple razón, es su cumple, cumple 17 añazos y creo que no hay mejor regalo que una gran dosis de momentos inolvidables. Por mucho que pase el tiempo nada ni nadie  conseguirá arrancar todo lo vivido, porque es inolvidable pequeña y si tu no te acuerdas de todo yo estare siempre a tu lado para recordartelo, porque cuando digo siempre no me refiero a los siguientes dos años no, me refiero a toda una vida, me refiero a tomar helados de viejecitos sentados en un banco, a salir de vacaciones con nuestros hijos. Creo que a dia de hoy aun no he encontrado las palabras exactas con las que agradecerte todo esto, pero si algo se es que estoy orgulloso de tenerte, que cuando alguien me pregunta quien es tu mejor amiga, sonrío y digo con total seguridad Irene Blazquez Dieguez. Disfruta mucho de tu dia porque te lo mereces. Te quiero mucho muchisimo hasta el infinito. Alfon Wasauski.


PD: Recuerda divina se nace no se hace (:


PD2: FELICIDADES!!!




No hay comentarios:

Publicar un comentario